Sentencian a cinco años de cárcel a Cristian Iván, feminicida de Keila Nicole en BC

Cinco años de prisión, la pena máxima establecida por ley para una persona menor de edad, fue la sentencia contra Cristian Iván “N”, responsable del feminicidio de Keila Nicole Duarte Acevedo, perpetrado en el poblado de El Rosario, municipio de San Quintín, Baja California.

Keila Nicole, una adolescente de 13 años, desapareció el 2 de julio en San Quintín, cerca de Rosario, en Baja California. La Fiscalía del Estado ha informado este martes de que la menor fue hallada al día siguiente en una escena desgarradora: desmembrada y decapitada debajo de un árbol. Las autoridades ya han detenido al principal sospechoso, un joven de 16 años que, según la dependencia, ha confesado haberse inspirado en la serie de televisión Dexter, sobre un asesino en serie en Miami. La fiscal María Elena Andrade Ramírez, visiblemente afectada por el horror del crimen, ha compartido que todavía no han conseguido establecer el móvil del delito.

El brutal asesinato de la menor ocurre apenas unos días después de la masacre de tres niñas y su madre, en Sonora, estado vecino de Baja California. La semana pasada, las autoridades de aquel Estado hallaron, primero, el cuerpo de una mujer de 28 años, en la carretera 36 Norte, en Hermosillo. Al día siguiente, aparecieron los cuerpos sin vida de sus hijas, dos de 11 años y una nueve, en la misma carretera, unos kilómetros adelante. La Fiscalía detuvo a la pareja de la mujer por los asesinatos. El caso horrorizaba a la ciudad y a la opinión pública, que ahora enfrenta una situación parecida.

Cuando Keila Nicole no regresó a casa el miércoles pasado, su mamá salió buscarla de inmediato. Su pueblo, San Quintín, cerca de Rosario, en Baja California, es una pequeña población pesquera y agrícola. Pese a ello, no pudieron encontrarla. La adolescente le dijo a su madre que iba a reunirse con unas amigas. La familia avisó a la policía y se comenzó el operativo de búsqueda y la investigación.

Al día siguiente, los investigadores hallaron finalmente a Keila, en un lugar cercano a la comunidad, pero “despoblado e inhóspito”, según ha detallado Andrade Ramírez en rueda de prensa. El cuerpo de la adolescente estaba entre la vegetación, en una zona de cerros. La habían decapitado y desmembrado piernas y brazos. Solo encontraron una de las extremidades a 50 metros del lugar. Los agentes solicitaron órdenes de cateo en el domicilio de un adolescente de 16 años con el que se había reunido la víctima el día de su desaparición, según le contó por teléfono a una amiga.

Antes de morir, Keila Nicole llegó a mandar algunos mensajes. El detenido la invitó a salir y se encontraron en el lugar donde apareció el cuerpo. En la conversación por chat con su amiga, le dijo que “tenía mucho miedo” y que el adolescente “la miraba muy raro”. En un momento, ella buscó la sombra de un árbol y cuando se posicionó allí, él le preguntó si estaba bien, según ha informado la Fiscalía a partir del relato del acusado. “Le dijo ‘qué bueno que te colocaste ahí’ y la golpeó en la cabeza”, ha detallado la fiscal.

Cuando detuvieron al sospechoso, los investigadores encontraron supuestamente en su casa pruebas de cómo había planeado el ataque y el descuartizamiento. En las imágenes que presentó la Fiscalía se aprecian dibujos sobre hojas de un cuaderno. En ellos se ven cuerpos desmembrados, acuchillados y con indicaciones de dónde se tiene que cortar. “Solicitamos orden de aprensión del sujeto, que manifestó en algunas entrevistas que fue a partir de la serie televisa ‘Dexter’ que le surgió la idea para llevar a cabo el evento delictivo que se le investiga”, ha añadido Andrade Ramírez.

El programa televisivo al que hace referencia el detenido es una serie de ocho temporadas que terminó de emitirse en 2013. La trama seguía a un forense de la policía de Miami que también era un asesino serial. Su éxito fue tal que se anunció una nueva temporada en 2021 y una precuela estrenada este año.

La fiscal ha confesado que, aunque siguen las investigaciones, no se ha podido determinar el móvil del crimen que ha sacudido a San Quintín, a Rosario y a todo el Estado de Baja California. “Nada lo justifica, pero no encontramos el más mínimo móvil para actuar de esta manera contra la víctima, de esta manera tan aberrante y tan cruel”, ha señalado Andrade Ramírez, quien ha detallado que el caso se lleva en conjunto con la fiscal especializada en adolescentes del municipio. “Esta persona está detenida por el delito de feminicidio con todas las calificativas agravadas y las contempladas en el código. Vamos a seguir el procedimiento”, ha sentenciado.

La sentencia contra el joven de 16 años fue dada conocer este pasado viernes 7 de noviembre, tras resolverse el proceso mediante un juicio abreviado.

Esto, por el ataque en contra la víctima de apenas 13 años de edad el pasado 1 de julio del año en curso en la comunidad citada.

Conforme a los datos oficiales, Keila fue vista por última vez cuando se dirigía con Cristian hacia una zona conocida popularmente como “la cueva”; antes de su desaparición, ella logró enviar un mensaje de texto a una amiga, donde expresó temor porque su novio “traía un palo”.

Lo anterior generó un operativo de búsqueda donde las autoridades únicamente encontraron partes del cuerpo de la menor; a la fecha, aún hay restos que siguen sin ser localizados.

Álvaro Castilla Gracia, magistrado de la Sala Especializada en Justicia para Adolescentes del Tribunal Superior de Justicia del Estado, explicó que el caso se condujo conforme a la Ley Nacional del Sistema Integral de Justicia Penal para Adolescentes.

Precisó que dicha normativa, junto con el artículo 201 del Código Penal, permite la aplicación de un procedimiento abreviado, mediante el cual el imputado reconoce su participación y acepta las medidas sancionatorias.

En este marco, la pena máxima para un menor de 16 años es de cinco años de internamiento en un centro especializado.

Conforme a la investigación de la Fiscalía General del Estado de Baja California (FGE), el adolescente guardaba dibujos de figuras humanas desmembradas y, al parecer, se inspiró en la serie televisiva “Dexter”.

Tras la detención del joven, la familia exigió que fuera acusado como adulto; también fueron removidos e investigados tres policías municipales de San Quintín, por presunta omisión al momento de generarse el caso.