A más de un mes del fatal accidente en Saucillo el militar responsable sigue en libertad

El pasado 20 de julio por la noche se registró un trágico accidente en la carretera que conecta la colonia Nicolás Bravo con Naica, en el municipio de Saucillo, donde perdió la vida Susana Ivonne Cárdenas Rodríguez, conocida cariñosamente como “Chikis”, mientras que un niño de apenas dos años sufrió lesiones graves que lo mantienen hospitalizado en estado delicado.

La situación causó consternación en la comunidad y hasta hoy sigue generando reclamos de justicia, pues según los testimonios recabados, la unidad de la víctima fue embestida por un vehículo particular conducido por un subteniente del Ejército Mexicano, quien presuntamente viajaba a exceso de velocidad, sin luces, realizando maniobras imprudentes y bajo los influjos del alcohol.

Testigos señalaron que tras el choque, a la llegada de otros compañeros militares, se observó cómo retiraban de la unidad responsable botellas vacías y bebidas embriagantes, lo que refuerza la sospecha de que el conductor manejaba en estado inconveniente.

El impacto fue inevitable y terminó con la vida de Susana en el lugar, mientras que su acompañante y el menor resultaron con heridas de gravedad, por lo que el niño permanece internado en un hospital de la ciudad de Chihuahua, donde los médicos han advertido que no volverá a caminar sin un largo y costoso proceso de rehabilitación.

La víctima dejó en la orfandad a tres hijos: un adolescente de 14 años, un niño de 6 y el pequeño de 2 años que ahora enfrenta secuelas.

La indignación creció cuando se confirmó que el Ministerio Público de Saucillo dejó en libertad al militar antes de cumplirse las 48 horas de su detención, sin notificar a la familia, ante lo cual, vecinos y allegados realizaron protestas frente a la Fiscalía en Saucillo, lo que derivó en que el caso fuera trasladado a la Fiscalía de Camargo, donde se espera una investigación más seria y transparente.

Amigos y familiares recuerdan a Susana como una mujer alegre y solidaria, cuya ausencia ha marcado profundamente a la comunidad, que hoy exige: “No queremos silencio ni olvido, exigimos justicia”.

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