Hallan muerto a Alejandro Fracaroli, colaborador de un Nobel de Química
El investigador también colaboró con Omar Yaghi, reciente Premio Nobel de Química 2025.

Tras seis días de intensa búsqueda, autoridades alemanas confirmaron el pasado domingo el hallazgo sin vida del científico argentino Alejandro Fracaroli, quien se encontraba desaparecido desde el pasado 13 de octubre. El cuerpo fue localizado en un arroyo dentro de una zona boscosa de Karlsruhe-Rintheim, en el suroeste de Alemania.
El investigador cordobés de 44 años, integrante del CONICET y docente en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), se encontraba desde fines de agosto en Alemania desarrollando un proyecto de nanotecnología en el prestigioso Instituto de Tecnología de Karlsruhe (KIT), una de las instituciones científicas más reconocidas de Europa.
Alejandro Fracaroli era doctor en Ciencias Químicas y se desempeñaba en el Departamento de Química Orgánica de la Facultad de Ciencias Químicas (FCQ) de la UNC, además de integrar el Instituto de Investigaciones en Físico-Química de Córdoba (INFIQC).
Según su ficha institucional del CONICET, su campo de especialización estaba centrado en el desarrollo de nuevos materiales. Entre sus investigaciones más recientes, había publicado un estudio sobre moléculas que regulan la síntesis de proteínas en plantas, conocimientos aplicados actualmente en la transformación genética del arroz.
Su esposa, Gabriela Furlan, recordó que Alejandro “siempre soñó con trabajar en equipos internacionales, porque veía en la ciencia una forma de unir países y crear conocimiento compartido”.
El investigador también colaboró con Omar Yaghi, reciente Premio Nobel de Química 2025, reconocido por su trabajo en redes metal-orgánicas y materiales sostenibles.
En sus redes sociales, Fracaroli compartía momentos con su esposa y sus dos hijos, además de fotos familiares tomadas en Córdoba capital, su ciudad natal. Su última publicación en Facebook, de junio pasado, lo muestra sonriente junto a su hijo en el Cabildo de Córdoba.
En la red social X (Twitter), donde su última actividad fue en 2021, difundía noticias científicas, congresos y eventos académicos internacionales.
El martes 14 de octubre, compañeros del KIT reportaron su ausencia en el laboratorio. Su celular permanecía apagado por más de 20 horas, lo que activó un operativo de búsqueda encabezado por la Policía de Karlsruhe, con apoyo de unidades caninas y drones térmicos.
Su último contacto confirmado había sido una videollamada con su esposa el domingo anterior. Ante la falta de noticias, su hermano viajó desde Argentina para sumarse al operativo y acompañar las diligencias.
Mientras tanto, desde Argentina, el CONICET, la UNC y colegas de la comunidad científica lanzaron una campaña internacional en redes sociales para encontrarlo.
El cuerpo de Fracaroli fue encontrado en una zona boscosa cercana a un arroyo del distrito de Rintheim, según confirmaron fuentes policiales alemanas.
Las autoridades manejan como principal hipótesis un accidente, aunque la Fiscalía de Karlsruhe aún analiza los resultados de la autopsia para determinar las causas exactas del deceso.
De acuerdo con los primeros reportes, el científico habría caído accidentalmente al curso de agua y se habría ahogado. No se encontraron indicios de violencia en el lugar.
El CONICET, la Universidad Nacional de Córdoba y el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación Argentina expresaron su pesar por la pérdida.
Alejandro fue un investigador brillante, comprometido con la ciencia argentina y con la cooperación internacional”, destacó un comunicado del CONICET.
El Ministerio de Relaciones Exteriores argentino trabaja con el consulado en Frankfurt para repatriar los restos de Fracaroli a Córdoba en los próximos días.